Que la crisis causada por el Covid-19 va a deteriorar profundamente a la economía ya es un hecho. Todos los indicadores económicos así lo indican. Pero no va a afectar igual a todas las empresas: ¿a qué sectores de la economía va a golpear más y durante más tiempo?
Las características de la crisis, que ha obligado a gran parte de la población mundial a confinarse en sus casas durante un largo periodo de tiempo, ha repercutido de distinta manera a las empresas, según su área de actividad.
Apoyándonos en distintos estudios realizados durante los meses de marzo y abril, vamos a analizar qué sectores están más afectados por la crisis, qué sectores están aguantando mejor y cuáles son las perspectivas de recuperación a futuro de cada uno ante el nuevo escenario que se presenta.
Cómo afecta la crisis del coronavirus, por sectores económicos
Aerolíneas, ocio y turismo
Los límites a la movilidad de las personas, en primer lugar por el confinamiento y posteriormente por las restricciones derivadas del distanciamiento social que se va a imponer hasta hallar la vacuna del Covid-19, impactan directamente en el modelo de negocio de los sectores de los transportes de pasajeros, el ocio y el turismo.
Un estudio de Deloitte estima que desde que se levante el confinamiento pasarán al menos siete meses hasta que el ocio, las aerolíneas y el turismo se acerquen a la normalidad.
Turismo
El turismo es el ejemplo claro de un sector totalmente afectado por la crisis, ya que está paralizado y las previsiones no son nada halagüeñas.
Parémonos en España, una potencia mundial en este sector, y a las estimaciones para 2020 de Exceltur, la patronal del turismo, ante un escenario de restricciones de 3 meses:
- Caída del PIB turístico del 60%.
- Descenso de la facturación estimada de 92.000 millones de euros.
- La demanda no empezará su recuperación hasta finales de mayo, y se focalizará en el turismo nacional.
Muchos expertos alertan de que, cuando desaparezcan las restricciones aéreas, muchos potenciales turistas tendrán temor y diferirán sus viajes hasta que consideren que es seguro. Y este proceso mental será largo en el tiempo.
Aerolíneas
El de las aerolíneas es otro gran sector perjudicado por las consecuencias de la pandemia: los países han cerrado prácticamente sus fronteras y ya nadie quiere viajar por miedo al virus.
Las flotas de aviones de las aerolíneas están paradas y los gastos fijos disparan la deuda en un sector muy competitivo, donde los márgenes son estrechos.
La consecuencia, que ya está ocurriendo, es la desaparición de empresas:
- La noruega Norwegian ya ha presentado concurso de acreedores para cuatro filiales.
- Virgin Australia también ha entrado en concurso de acreedores y Virgin Atlantic está a un paso.
Considerado un sector estratégico, los gobiernos de varios países están rescatando y nacionalizando estas empresas para salvarlas de la quiebra, como ha hecho Italia con Alitalia.
Deporte, cultura y ocio
El ocio de masas tardará en recuperarse a causa de las restricciones a la concentración de personas:
- Deporte. Las grandes ligas de fútbol; los Juegos Olímpicos de Tokio, el Tour de Francia, Roland Garros… Todas las grandes competiciones deportivas, que mueven miles de millones de euros, se han suspendido y todavía existen certezas sobre cuándo y cómo se van a retomar.
- Ocio. Todas las empresas especializadas en ocio que reúna a muchas personas fuera de casa (por ejemplo, los parques de atracciones) está actualmente paralizado.
- Cultura. Los conciertos, los teatros, los museos, las salas de cine y grandes eventos como los festivales han cesado en seco su actividad y todavía no se vislumbra una vuelta a la normalidad. En este punto, plataformas online como Netflix están ganado la partida e incrementando sus usuarios.
Energía
El sector energético (electricidad, petróleo, gas) va de la mano de la marcha de la economía: si la economía de un país crece, el gasto energético sube a causa del funcionamiento de las empresas.
El frenazo de la economía por el confinamiento ha causado un impacto directo: el desplome de la movilidad ha derivado en una caída vertiginosa de la demanda de petróleo, llegando a producirse situaciones nunca vistas como que el barril de petróleo Texas alcance precios negativos.
En cuanto al sector eléctrico, pese a que el consumo en los hogares no cambia (e incluso aumenta con el confinamiento); el marcado descenso del consumo en las empresas, y sobre todo en la industria, reducirá sus ingresos. Esto sucederá de forma igual con el gas.
Sector financiero
El parón de la actividad económica va a crear un agujero en la cuenta de resultados de las entidades bancarias, las cuales todavía no habían superado los daños de la crisis de 2008.
El cierre de empresas y el aumento del paro incrementarán la mora. Además, los escasos márgenes ante unos tipos de interés a cero dejan a los bancos con pocas posibilidades para actuar, tal y como está reflejando sus acusadas caídas en Bolsa.
¿Qué soluciones existen para el sector? Aumentar la eficiencia, lo que conllevará que se acelere la reducción de sucursales bancarias y el proceso de digitalización (aquí tiene un componente cada vez más importante la tecnología y el sector fintech); y dedicar una atención cada vez más personalizada al cliente. Desde el sector se da por hecho fusiones entre distintas entidades para aprovechar sinergias.
Alimentación
El sector alimentario es uno de los que mejor ha resistido, poniéndose en evidencia de que supone un área estratégica para el funcionamiento de un país.
Todo consumo que sea de bienes de primera necesidad, con alimentación y bebidas como principal punto, va a mantenerse.
Agricultura
Olvidada por otros sectores más sexys, adquiere de nuevo relevancia como eslabón imprescindible para algo tan importante como comer.
No ha sufrido restricciones de actividad y actualmente se encuentra con un problema: encontrar gente para trabajar en las distintas campañas, ya que últimamente se contrataba a personas extranjeras y ahora es imposible debido al cierre de fronteras.
Distribución
Hipermercados, supermercados y tiendas de alimentación han seguido abiertos en el periodo de confinamiento al proporcionar productos de primera necesidad.
Es de los únicos sectores que no ha registrado un descenso de ventas. Es más, se ha producido un leve aumento por el confinamiento de las personas en sus hogares. Antes muchos de ellos comían o cenaban en bares y restaurantes, actualmente cerrados.
Restauración
Los bares y restaurantes, incluidas las grandes cadenas de restaurantes, son unos de los grandes damnificados por la crisis. No solo continúan cerrados, sino que en su reapertura se impondrán restricciones de aforo y la instalación de elementos como mamparas que mermarán enormemente su rentabilidad.
Si su situación es delicada, el proceso de reactivación de la economía tampoco les presenta una situación cómoda: como ya sucede en varios países donde la actividad ha vuelto, gran parte de sus clientes habituales, por miedo, son todavía reticentes a consumir en ellos.
La única solución a corto plazo para este sector es el delivery (entrega a domicilio), que ha permitido a algunos negocios mantenerse abiertos, aunque sea con una mínima actividad.
Sector sanitario
Los gobiernos de todo el mundo están focalizados en vencer al desafío del Covid-19, un problema de salud pública.
Por ello, los Estados están incrementando enormemente su gasto para proveer de medios a sus sistemas de salud, algo que se mantendrá en el tiempo hasta que se recupere la normalidad.
En este contexto, las empresas dedicadas a los sectores sanitario, farmacéutico y de biotecnología tienen una oportunidad de oro para aumentar su cifra de negocio, tanto investigando en nuevas vacunas y medicamentos, como proveyendo material y tecnología especializados.
Tecnología
El sector tecnológico, si nos atenemos a la evolución de las bolsas mundiales, es el que mejor se ha adaptado a los cambios derivados de la crisis del coronavirus.
El confinamiento ha obligado a la población a quedarse en casa y a contactar con el exterior a través de Internet, lo que ha disparado las posibilidades a las empresas tecnológicas: a través de una plataforma de teleconferencia o con herramientas de trabajo online, por ejemplo.
High Tech
Campos como el de la inteligencia artificial, el Big Data, la ciberseguridad o la geolocalización están ahora ampliamente demandados a causa de la necesidad de los gobiernos por controlar la evolución de la pandemia y la movilidad de los ciudadanos.
En Marina de Empresas tenemos varios ejemplos de startups especializadas en este sector,o que han virado hacia él como por ejemplo Play&Go, que utiliza IA para ordenar la necesidad de camas y respiradores en los hospitales, o Travelest,que ha creado un mapa interactivo para seguir el coronavirus.
Ecommerce
La venta por Internet es otro de los ámbitos que ha podido resistir mejor, sobre todo en los siguientes sectores:
- Supermercados online. El temor de gran parte de la población a infectarse de Covid-19 ha disparado las compras en los supermercados online.
- Delivery. Como se ha mencionado anteriormente, ante el cierre de bares y restaurantes, la comida a domicilio se ha alzado como una alternativa para aquel que no quiere cocinar.
- Moda y belleza. Los grandes del retail, con las tiendas físicas cerradas, han derivado su actividad a sus comercios online, aunque no han podido contener el descenso de ventas.
- Resto de productos. La imposibilidad de comprar en tienda física de algo que no sean productos de alimentación o limpieza ha disparado la actividad de gigantes como Amazon o eBay. Productos que te ayudan a hacer deporte en casa o de bricolaje son dos de las grandes tendencias al alza.
La crisis ha motivado que cientos de miles de personas habituadas al comercio tradicional se trasladen en masa al comercio electrónico por obligación.
Un movimiento coyuntural que puede implicar una tendencia a futuro: muchos de ellos detectarán ventajas y quizás continuen comprando de forma online cuando sea ya posible comprar en tienda física.
Videojuegos, eGames y eLearning
El cierre de los centros educativos y la desaparición del ocio en el exterior y de la práctica de deporte ha supuesto la explosión del eLearning, de los videojuegos y de los eGames (deporte electrónico).
La gente recibe formación y se divierte en casa. Esto, que es momentáneo por el confinamiento, puede sin embargo acelerar la tendencia ascendente que ya experimentaban estos sectores con anterioridad a la crisis del Covid-19.
Conclusiones: cambios en el comportamiento del consumidor
Aunque las medidas de confinamiento van a ser coyunturales, la reactivación de la economía va a presentar un panorama totalmente distinto al anterior: los sectores más afectados experimentarán una fuerte destrucción de empresas.
Además, el deterioro de la economía implicará un aumento del paro y una dificultad de acceso a la financiación (pese a los esfuerzos de los bancos centrales por evitarlo), lo que derivará en un descenso del consumo a causa de la menor capacidad de gasto de la población.
Por último, los confinamientos y las recomendaciones de distanciamiento social, que pueden extenderse hasta 2 o 3 años, van a modificar los comportamientos de los consumidores y van a implicar dificultades para todos aquellos negocios que impliquen la concentración de varias personas en un mismo sitio.
“El confinamiento y las recomendaciones de distanciamiento social van a cambiar el comportamiento de los consumidores”
Son pocos los expertos que creen que la economía se va a recuperar en “V”; la mayoría proyectan una recuperación lenta, Por ello, es importante saber cómo va a afectar al modelo de negocio de tu empresa, ya seas propietario, empleado o inversor. Las reglas del juego han cambiado y, cuanto antes reacciones, antes podrás minimizar el impacto de la crisis.
Si quieres saber cómo actuar en el área financiera de una empresa ante este escenario, te recomiendo este post reciente del Blog de EDEM: Cómo gestionar las finanzas de una empresa ante la crisis.
