×

Mi experiencia en el MBA Junior

Quiero compartir contigo mis sensaciones y aprendizajes acerca de mi experiencia en el MBA Junior de EDEM.

ÍNDICE

Todo empezó con un copy, un buen copy sobre el MBA Junior que me hizo parar en mitad de la calle y levantar una ceja. Muy bien tirado, en el momento justo.

Estaba terminando la carrera y no sabía cuál iba a ser mi siguiente paso. Acababa de empezar las prácticas en Lanzadera y para mi EDEM era lo que estaba al otro lado de la cafetería. Rellené el formulario y entré de cabeza al funnel.  ”A ver qué pasa”, pensé.

Vaya si pasaron cosas. No ha pasado ni un año y aquí estoy, escribiendo este post, con toda la ilusión de un niño, un niño que va a intentar transmitir todo lo que ha sentido durante esta experiencia en tan solo unas líneas, y no va a ser fácil sintetizar tanto, aviso.

Comencé el proceso de selección lleno de dudas… ¿Estaré a la altura?, ¿Seré lo que están buscando? pero no era momento de pensar en eso, había que jugar nuestras mejores cartas e ir a por ello.

Abraham, has sido seleccionado para la decimosexta edición del MBA Junior, enhorabuena.

Primeras sensaciones 

El primer día nos avisaron, en EDEM no se enseña ni se aprende de la misma forma ni al mismo ritmo al que la mayoría de nosotros estábamos acostumbrados, y tenían toda la razón. Era el momento de “desaprender” y empezar a cuestionarnos mucho de lo que traíamos en la mochila.

En EDEM, se trabaja de verdad y hay que esforzarse para conseguir las cosas, pero a cambio, si estás dispuesto, aprenderás a un ritmo que nunca te hubieras imaginado que serías capaz de alcanzar.

En EDEM se aprende haciendo, mucho y bien, con detalles que marcan la diferencia.

Los profesores son profesionales en activo, y eso se nota. No son de los que te leen las diapositivas que hicieron en los 90 y no han cambiado ni las fechas. Son de los que te ponen en las presentaciones una noticia que salió ayer, o incluso esa misma mañana, para que estés al día y puedas ir un paso por delante.

¿Qué aprendí?

El temario se divide en módulos que combinan el contenido teórico con la aplicación práctica y se complementan con sesiones de skills transversales, talleres, ponencias de startups, y visitas a empresas.

1. Innovación y creatividad

En estas primeras clases empezamos a conocernos, desarrollando en grupo un proyecto completo basado en la metodología design thinking y sus fases: empathize, define, ideate, prototype and test.

Además, aprendimos a elaborar un pitch y simulamos nuestra primera ronda de inversión.

Me quedo con un concepto “Building first, polishing later”, lo perfecto como enemigo de lo bueno, basado en la filosofía Lean Startup.

2. Finanzas

Sin duda, el módulo más extenso y trabajado del curso, y no es para menos, ya que el mundo de las finanzas da para mucho…

Empezamos con un repaso general al funcionamiento de los mercados globales y los actores que intervienen, haciendo especial énfasis en los ODS y la sostenibilidad.

En este módulo pude darme cuenta de que una buena gestión financiera y fiscal es fundamental, y puede marcar la diferencia entre crecer, sobrevivir o hundirse, independientemente del tamaño, sector o mercado en el que se encuentre la empresa.

3. Negocio y ventas.

Pasamos a la parte de marketing en la que tocamos todos los palos. Desde la creación de buyers persona, funnels de ventas, imagen de marca y comunidad y redes sociales, hasta las intrincadas siglas que significaban muchas cosas CRM, CPC, SEO, CAC, SEM… al final se te quedan, pero para ello hay que usarlas.

Aprendimos el funcionamiento de las herramientas más punteras como Hubspot, Yoast SEO, Semrush, FacebookAds o Google analytics y entonces todas esas siglas y conceptos teóricos empezaron a cobrar sentido.

Además, si eres de los de “tengo LinkedIn pero no lo uso mucho” eso se acabó. Era el momento de romper el hielo, perder la vergüenza a hablar sobre uno mismo y hacernos notar.

4. Procesos y operaciones.

Aprendimos que no hay modelo de negocio que se resista a un buen Canvas y la importancia de tener un modelo de gestión adaptado a las necesidades y objetivos de cada organización.

Agile, scrum, lean, kaizen… parecen Pokemons pero no lo son. En la parte de gestión de proyectos aprendimos a sacar el máximo partido a estas metodologías y lo que es aún más importante, cómo y cuándo aplicarlas.

Medir para poder mejorar. No podíamos dejar de lado los KPIs y en ello nos enfocamos.

Aprendimos a establecerlos con un criterio que se adapte a unas necesidades reales y a seguirlos de cerca para que obtener un diagnóstico preciso del estado de la empresa, así como qué palancas deberíamos accionar si las cosas se tuercen.                                                                              

5. Data

Comenzamos las clases de data con las sesiones de cloud y continuamos con la parte de inteligencia artificial en la que aprendimos sobre algoritmos especializados, big data, machine learning, deep learning y las infinitas posibilidades que ofrecen.

“Data talk about stories, not about numbers”

Pasamos a la parte de Blockchain en la que hablamos sobre el nacimiento de las criptodivisas con bitcoin, las finanzas descentralizadas, la tokenización, la evolución de los smart contracts, los NFTs y los trends del metaverso.

6. Gestión de personas

El concepto Soft Skills ya no nos suena a nuevo, se ha demostrado que es necesario trabajar las habilidades blandas y cada vez son más demandadas por las empresas. En el MBA se abordan desde un punto de vista realista y pragmático, y es que de poco valen los conceptos teóricos sin una aplicación adecuada, hay que recordar que antes que profesionales, somos personas.

Papel de periódico, pajitas, celo, huevos, agua que no moja, cuerda, espagueti… variopintos recursos utilizados para asimilar los conceptos de liderazgo, comunicación, negociación, trabajo en equipo etc. Y es que a veces, no viene mal levantar la vista del ordenador y mancharse un poco las manos.

Una Experiencia inmejorable.

Se acercó enero, y había que ir preparando abrigo y guantes, dejamos la terreta y las vistas al mar para vivir nuestra última aventura juntos en Alemania. Un mes y medio conociendo otra cultura, otra forma de trabajar y de formarse en el curso de Management of information systems de Schiller International University.

En esas semanas tuvimos momentos de desconexión, fiesta, viajes y risas, pero a su vez, teníamos una misión, encontrar una empresa dónde hacer nuestras prácticas, o aún mejor, en la que empezar a trabajar a nuestra vuelta a España.

Nos ayudó a conocernos fuera de las aulas y a estrechar los lazos que ya teníamos.

Cada mañana al llegar a Schiller nos poníamos al día de cómo íbamos en nuestros procesos. Lo que más me llamó la atención fue la atmósfera común que se creó esos días. No sé si fue la sensación de despedida, nuestro mini erasmus o el buen rollo que nos unía, pero sin duda aprovechamos cada minuto en tierras germanas.

EDEM: The Place to be

Edem no solo ofrece formación, ofrece una forma diferente de pensar y de entender el mundo de la empresa, te hace cuestionarte lo que traías de casa y te ayuda a desaprender para poder crecer como profesional.

Te hace ver que no eres “raro” por querer ir un paso más allá, que ser “friki” te puede hacer llegar muy lejos y que pensar diferente, a veces, no está tan mal.

Anímate a vivir la misma experiencia que viví yo con el MBA Junior. Edem es el sitio de la “Risky People”, de los que nadan a contracorriente y de los que suelen pensar “out of the box”.

No te pierdas nada

Informarte que al dejarnos tu email estás consintiendo expresamente a que EDEM Escuela de empresarios te envíe correos con información sobre el mundo formativo y del emprendimiento (noticias, consejos, formaciones, etc.), así como de los eventos que se realicen en Marina de Empresas. Puedes ejercitar tus derechos a través de dpo@edem.es. También puede reclamar a la Agencia Española de Protección de Datos (www.aepd.es). Para más información sobre el tratamiento y tus derechos accede aquí.