Evidentemente, en una situación de crisis, la importancia del departamento financiero en una empresa se agiganta, porque es el área que controla la caja.
Es decir, los flujos de cobros y de pagos, tanto en el corto como en el largo plazo, lo que va a determinar si la empresa supera o no el tremendo escenario que le toca afrontar.
Sencillamente, porque en una situación de economía de guerra o de lucha por la supervivencia, el mandato supremo a seguir es que hay que preservar la caja a toda costa.
El departamento financiero controla los aspectos vitales
Por ello, el director financiero conoce y controla aspectos vitales hacia adentro y hacia afuera de la compañía.
Hacia el interior de la empresa
Hacia el interior de la empresa, la cuestión esencial para los empleados es si su empresa sobrevivirá en el largo plazo.
A la vez, en el corto plazo será fundamental conocer si se van a poder cobrar las nóminas o no en su totalidad, o si habrá que estudiar una solución intermedia como un recorte en los salarios por un tiempo determinado.
Hacia el exterior de la empresa
Mientras, hacia el exterior de la empresa se tienen que tener en cuenta los siguientes aspectos:
- Si se puede continuar satisfaciendo las cuotas de los préstamos o no, a las entidades financieras que se los concedieron,
- Si se va a poder pagar en el tiempo y la forma acordada a los proveedores, o si se deberá de negociar los plazos.
- Este último punto, también tiene un reverso y es que los clientes, que estén en situación comprometida, pueden muy bien plantear un alargamiento de los plazos de cobro.
Estrategia a adoptar sobre 3 pivotes
Además, la estrategia que diseñará el departamento financiero pivotará sobre 3 áreas para generar entradas de dinero y reducir las salidas, porque su misión será mantener la empresa a flote y ganar tiempo hasta que la demanda de su negocio y sus clientes se recuperen.
Hay que ganar tiempo hasta que la demanda remonte
1. Seguir generando saldo positivo
Se presenta como inexcusable continuar generando un saldo positivo de flujos de caja de entrada con mi negocio principal.
Reducir gastos
He de reducir los gastos que me drenan liquidez en el momento presente. Ya hemos comentado la cuestión de los salarios. Igualmente, tal vez podría, cerrar delegaciones comerciales que tuviera alquiladas y enviar a los empleados a teletrabajar a sus casas, lo cual podría implicar una formación ad hoc para los empleados.
Del mismo modo, las moratorias que concedieran las autoridades fiscales en el pago de impuestos o los aplazamientos en el pago de préstamos que les ofrecieran las entidades financieras con las que trabajen contribuirían a este objetivo.
¿Puedo facturar y cobrar algo ya?
Por ejemplo, las aerolíneas están en una situación muy comprometida, pues la venta de billetes en este trimestre se ha desplomado. A la vez que han de hacer frente a unos importantes gastos que han de atender ya, derivados del mantenimiento y pago de los préstamos obtenidos para comprar sus flotas de aviones.
Sin embargo, pueden comenzar a vender billetes para la primavera y el verano 2021, con precios bajos, con lo que si lo consiguen llenarán su caja. Ésta es la razón básica por la que las aerolíneas tardan mucho tiempo en quebrar.
Por la misma razón, las empresas del sector textil lanzan ofertas, pues el tener stocks suponen un gasto y su venta genera dinero.
2. Reducir inversiones y vender activos
Otra estrategia a adoptar es la de reducir las inversiones y vender activos prescindibles: ¿Podría vender algún activo para generar liquidez?
Por ejemplo, la empresa podría plantearse vender parte de las instalaciones que ocupa, como oficinas y quedarse en ellas alquiladas, o vender vehículos para luego alquilar lo que necesitara.
De la misma manera, si la empresa tiene una cartera de activos de renta variable o renta fija, podría ser el momento de sacarlos al mercado. Lo difícil será no incurrir en pérdidas, pero lo prioritario es la liquidez.
3. Generar capital
El departamento financiero trabajará para diversificar las líneas de entrada de dinero a la compañía:
- ¿Podría acudir a alguna línea de ayuda, por ejemplo, el ICO, para sostener mi caja?
- ¿Puedo solicitar un préstamo directamente a una entidad financiera? ¿Qué avales me harían falta?
- O tal vez, pueda hacer una ampliación de capital que cubran mis socios o el propio Estado, con lo que asumiría una nacionalización parcial o total con un carácter temporal.
- ¿Puedo emitir deuda en mercado? Si tengo un tamaño considerable podría hacer una emisión de bonos.
Comunicación constante
Además de su visión analítica y su capacidad técnica para hacer proyecciones, la dirección financiera deberá de esforzarse en cuestiones comunicativas, pues se ha de mantener un constante contacto todas las partes mencionadas anteriormente, clientes, empleados, proveedores y bancos.
Su alineamiento en este apartado con la dirección de la empresa será de vital importancia.
Activar la recuperación
Por último, para aquellas empresas que superen esta recesión llegará el momento de activar la recuperación. Será un nuevo escenario totalmente diferente, en el que el mercado y los clientes habrán variado.
Seguramente, la tantas veces retrasada digitalización de la compañía será un hecho y se abrirán nuevas oportunidades de compra o consolidación con otras empresas similares, así como la de reclutar talento en un mercado laboral en el que crecerá la oferta.
Conclusiones
Tal y como he explicado, una buena dirección financiera es vital siempre, pero sobre todo en periodos de crisis, en el que las tensiones de liquidez pueden pasar factura a la empresa.
Nos hallamos en un momento en el que se hace más explícita la necesidad de contar con un departamento financiero robusto y con buenos conocimientos técnicos.
En esta línea, en EDEM ofrecemos programas tanto para aquellos profesionales en activo que quieren introducirse en el área de las finanzas con El ABC de las Finanzas como para recién graduados que quieran desarrollar su carrera en este área con un Master en Finanzas.
Si quieres ampliar información sobre la correcta dirección del departamento financiero, en este post del Blog de EDEM ya se abordó: Cómo ser un buen director financiero.